¿Sabías que este 4 de marzo ya no se celebra únicamente el Día Mundial de la Obesidad? Gracias al empuje de activistas y colectivos, la fecha se ha resignificado para convertirse en el Día Mundial contra la Gordofobia. Esto quiere decir que hoy dejamos de darle vueltas a las cifras del IMC y nos concentramos en una misión más jugosa: combatir esos prejuicios que tratan a las personas gordas como si fueran el “error tipográfico” de la naturaleza.
¿Qué es la gordofobia y por qué es tan grave?
La gordofobia es, en pocas palabras, la discriminación basada en el tamaño corporal. Es ese “comentario sin filtro” en el recreo, en la oficina o en las redes sociales que dice “estás mejor delgado”, olvidándose de que la salud no se mide en kilos ni en números de báscula. Activistas argumentan que el problema real no es el sobrepeso en sí, sino la estigmatización y el odio que se genera en torno a él. ¡Imagínate que la verdadera enfermedad sea juzgar a otros por cómo se ven!
Históricamente, el 4 de marzo se conocía como el Día Mundial de la Obesidad, una efeméride que se enfocaba en los riesgos de tener sobrepeso. Sin embargo, con el tiempo, muchas voces se alzaron diciendo: “¡Basta ya de patologizar nuestros cuerpos!” Así surgió el movimiento para resignificar esta fecha y transformarla en un día de lucha contra la gordofobia. El cambio no es solo semántico; es un grito colectivo para que se deje de juzgar a las personas por sus curvas, y en cambio, se promueva la diversidad corporal y el derecho a la salud integral.
No es casualidad que, al hablar de gordofobia, se mencione cómo este prejuicio impacta tanto en la salud física como en la mental. El estigma, los chistes crueles y la presión social pueden generar ansiedad, baja autoestima e incluso desencadenar desórdenes alimenticios. Pero aquí es donde entra la chispa del humor: algunos activistas y cómicos han empezado a reírse de la gordofobia. Con ingenio y picardía, transforman esos comentarios hirientes en armas contra la discriminación. ¿Quién dijo que no se puede defender la diversidad corporal con una buena carcajada?
“Si me dicen que estoy mejor sin esos kilos, les respondo: ¡si fuera tan fácil, todos estaríamos en la dieta del ‘clic y listo’!”
(inspirado en el humor que utiliza el activismo contra la gordofobia)
La cultura de la dieta y los estándares inalcanzables de belleza han hecho que muchas personas se sientan presionadas para encajar en moldes anticuados. Pero hoy, desde el Día Mundial contra la Gordofobia, se apuesta por una nutrición incluyente y por la aceptación de todos los cuerpos. Se trata de romper el círculo vicioso en el que “engordar” es sinónimo de fracaso personal y de reírnos de nosotros mismos de forma sana, sin caer en el odio.
Activistas rechazan el uso del Índice de Masa Corporal (IMC) como indicador único de salud, recordándonos que la verdadera salud se logra en todas las tallas. Y si de algo se ha aprendido, es que el humor puede ser un gran aliado en la lucha contra los prejuicios. ¡Porque si reírnos de la gordofobia nos hace libres, a carcajadas se vive mejor!
Hoy, 4 de marzo, celebremos la diversidad y defendamos el derecho a ser y sentirse bien sin importar el tamaño del cuerpo. Dejemos atrás los estigmas y abrazamos la idea de que cada cuerpo es único y valioso. Y la próxima vez que alguien suelte un comentario nefasto sobre el peso, responde con una sonrisa y, por qué no, ¡con un chiste! Porque la verdadera revolución comienza cuando aprendemos a reírnos de las normas absurdas y a vivir en cuerpo y alma sin miedo al juicio.
¡Feliz Día Mundial contra la Gordofobia!
Porque los cuerpos diversos son, sin duda, la mejor receta para una sociedad saludable y feliz.