Tal vez has escuchado la famosa frase “Después de tener un hijo, no vuelves a dormir en mucho tiempo”, un estudio publicado en la revista Sleep lo confirma.
Según la investigación, los padres después de tener un bebé no vuelven a dormir durante los seis primeros años.
“Tras la fuerte disminución de la satisfacción y la duración del sueño en los primeros meses post parto, ni el sueño de las madres ni de los padres se recupera por completo a los niveles precios al embarazo hasta 6 años después del nacimiento de su primer hijo”, se lee en el estudio.
Los padres se enfrentan a una etapa de cambios en dónde tienen que acoplarse al ritmo del bebé.
El recién nacido necesita alimento cada dos horas y aunque duermen en promedio 14 horas al día, por lo general lo hacen en cápsulas de tiempo o con un sueño interrumpido.
Por lo tanto, la satisfacción del sueño y la duración no se recupera hasta pasar un periodo de aproximadamente 6 años después de tener un bebé.
“La edad de los padres, los ingresos del hogar y la crianza doble frente a la monoparental no estaban relacionados, o solo estaban muy débilmente relacionados, con la mejora del sueño”.