Si con algo contamos los mexicanos es con maravillosas oportunidades de escapadas de fin de semana, por la gran cantidad de fantásticos lugares de descanso.
A continuación te dejaremos con 10 magníficos lugares para poder descansar y economizar.
1. Peña de Bernal, Querétaro
La Peña de Bernal es también escenario de una de las fascinantes celebraciones ceremoniales mexicanas, la fiesta del equinoccio de primavera.
El Museo de la Máscara de Bernal es uno de los más vistosos del país, con más de 300 piezas, las más valiosas confeccionadas con madera de patol.
2. Tlayacapan, Morelos
Este bello pueblo morelense en un lugar para disfrutar de su arquitectura, fiestas y espléndidos parques acuáticos.
Los amantes de las construcciones con historia deben ver y recorrer el antiguo Convento de San Juan Bautista, las numerosas y hermosas capillas y el Palacio Municipal
3. Huasca de Ocampo, Hidalgo
La primera localidad hidalguense en ser declarada Pueblo Mágico
Los prismas basálticos son el principal monumento natural local, unas estructuras rocosas de gran tamaño y perfección esculpidas por las corrientes de agua y el viento a lo largo de los milenios.
4. El Oro, Estado de México
El Tiro Norte, acondicionado para el turismo, tiene un piso transparente para admirar el pozo de vértigo y en el socavón San Juan puedes ver las herramientas y equipos utilizados en la minería del pasado.
Entre las edificaciones más sobresalientes se encuentran el Teatro Juárez, por cuyo escenario pasaron las grandes figuras mundiales del bello canto; la Iglesia de Nuestra Señora de Guadalupe, el Palacio Municipal y la Estación del Ferrocarril.
5. Cuetzalan, Puebla
Uno de los productos estrella del tianguis es la yolixpa, una bebida medicinal y embriagadora en cuya preparación se emplean hasta 30 hierbas
En torno al 4 de octubre, fecha de las fiestas patronales de San Francisco de Asís, se vive todo el esplendor precolombino y cristiano de esta encantadora localidad poblana.
6. Tequisquiapan, Querétaro
La primera cosa a disfrutar en el Pueblo Mágico es la Ruta del Queso y el Vino del bajío, visitando vitivinícolas como La Redonda, Finca Sala Vivé, Viñedos Azteca y Viñedos Los Rosales.
En este circuito gastronómico podrás maridar los vinos con algunos de los mejores quesos del país, producidos por casas de larga tradición, como Quesería Néole, Quesos Flor de Alfalfa, Bocanegra, y Quesos VAI.
7. Tepoztlán, Morelos
El Cerro o Montaña de El Tepozteco es un Área Natural Protegida con un sitio arqueológico construido por los Xochimilcas entre los siglos XII y XIV.
Durante las fiestas, los turistas cumplen el Reto del Tepozteco, que consiste en subir hasta la pirámide del centro adoratorio. Para honrar al dios del alcohol, muchos se ayudan con algunos mezcalitos y tequilitas. La música y las danzas prehispánicas sirven de marco a la fiesta.
8. Valle de Bravo, Estado de México
En Valle de Bravo hay que admirar la variedad y belleza de su paisaje arquitectónico, encabezados por el Templo de Santa María Ahuacatlán, la Iglesia de San Francisco de Asís y el Carmel Maranathá
Hermosa edificación religiosa de Valle de Bravo es la Gran Stupa para la Paz Mundial, el monumento funerario budista más grande, no solo de México, sino de todo el Mundo Occidental, con una altura de 36 metros.
9. Malinalco, Estado de México
La principal atracción turística del Pueblo Mágico es el yacimiento arqueológico de Cuauhtinchán, enclavado en el Cerro de los Ídolos.
En el sitio destaca el templo principal, una joya arquitectónica precolombina, ya que fue tallada en un monolito, por lo que ha sido comparada con la ciudad nabatea de Petra, en Jordania y con los templos egipcios de Abú-Simbel.
10. Cholula, Puebla
Cholula se precia de tener 365 templos, uno por cada día del año, el Ex Convento de San Gabriel y el Templo de la Virgen de los Remedios, cuyas bases se encuentran sobre la pirámide prehispánica de Tlachihualtépetl.
La primera piedra de la Plaza de Armas, ahora llamada Plaza de la Concordia, fue colocada en 1573 y su centro está presidido por una fuente con la imagen de San Miguel Arcángel, donada por el rey español Felipe II.