En un día lleno de nostalgia y celebración, el mundo de la cultura de los cómics conmemora el 95º aniversario del emblemático personaje Popeye “El Marino”. Fue un 17 de enero de 1929 cuando Elzie Crisler Segar presentó al valiente marinero en las páginas de la tira cómica “Timble Theater” del The New York Evening Journal, marcando el inicio de una fascinante travesía.
El diseño distintivo de Popeye, con sus antebrazos abultados, quijada imponente, y su ojo izquierdo de color azul, se convirtió en un sello característico del personaje, cuyo nombre proviene del término “pop-eye”, un apodo utilizado para los marineros con ojos dañados en la década de 1920.
A lo largo de las décadas, Popeye trascendió las viñetas para conquistar la televisión con series animadas y el séptimo arte, donde el talentoso actor Robin Williams le dio vida en la pantalla grande en la década de los ochenta. Su amor por la pipa de madera y su insaciable gusto por las espinacas, que le otorgaban “super fuerza”, son rasgos que han dejado una marca indeleble en la memoria colectiva.
Según la página oficial del peculiar marinero, el consumo de espinacas en Estados Unidos experimentó un aumento del 33% durante los años treinta gracias a la popularidad de Popeye. Además de su fuerza física, el personaje se distingue por su valentía ante los desafíos, combinada con una naturaleza amable y sin pretensiones.
En agosto de 1929, Popeye encontró el amor en Olivia, una mujer delgada con quien inició una tierna historia romántica con un pequeño beso en la mejilla. Sin embargo, no todo sería color de rosa, ya que en 1932 apareció su eterno rival, Bluto o Brutus, para agregar más emoción a sus peripecias.
En la actualidad, Popeye sigue siendo un ícono de la cultura pop, extendiendo su presencia a libros, ropa, figuras, juguetes, videojuegos, relojes, y más. Datos interesantes de su legado incluyen la primera cinta en 1933, la serie animada para televisión que se extendió de 1933 a 1960, el surgimiento del “Nuevo Show de Popeye” en 1978 de la mano de Hanna-Barbera, y la creación de su canal oficial en Youtube en 2017.
A nivel internacional, el reconocimiento de Popeye ha cruzado fronteras, adoptando nombres como Iron Arm en Italia, Karl Alfred en Suecia, y Skipper Skraek o “Terror of the Sea” en Dinamarca, entre otros. Así, tras 95 años de travesuras marítimas y hazañas espinacudas, Popeye “El Marino” continúa siendo un querido compañero en la memoria de todos aquellos que han disfrutado de sus aventuras a lo largo de las décadas. ¡Felicidades, Popeye!