En el vasto y a menudo turbulento mundo de la industria musical, no son raros los casos donde artistas se ven envueltos en situaciones financieras complejas y, a veces, trágicas. Una de estas historias involucra a la icónica banda británica The Who, quienes según revelaciones recientes de su guitarrista, nunca ganaron dinero con sus discos debido a la deshonestidad de su manager.
En una entrevista con NME, el guitarrista de The Who reveló que la banda nunca vio beneficios económicos de sus lanzamientos discográficos. La causa de esta pérdida masiva de dinero fue la mala gestión y los manejos fraudulentos de su manager de entonces. Con una risa, el músico inglés admitió que su pasión y su carrera “nunca se trató de dinero” y abordó la difícil situación financiera de la banda debido a estos malos manejos.
“¡Jaja! Nunca se ha tratado del dinero. De todos modos, The Who nunca ganó dinero con los malditos discos. Nuestros gerentes eran criminales. Nunca había visto una declaración de regalías de The Who antes de nuestra primera auditoría, que hicimos mientras hacíamos ‘Quadrophenia’. Se supo que Kit Lambert había robado todos mis derechos de autor de la publicación italiana para comprarse un palacio en Venecia. Hay cisnes negros en nuestro negocio, y son los que siempre se llevan todo el dinero”, compartió en la entrevista.
La conversación también dio paso a una anécdota conmovedora con el legendario guitarrista Jimi Hendrix. Pete relató cómo Hendrix, en las últimas semanas de su vida, le enseñó una lección valiosa sobre la indiferencia hacia el dinero. A pesar de su inmenso éxito, Hendrix estaba económicamente arruinado, lo que subraya la dura realidad que enfrentan muchos artistas.
“Mira al legendario Jimi Hendrix, lo vi en Los Ángeles en las últimas dos semanas de su vida. Estaba contento, era muy amable conmigo, y no siempre lo había sido en el pasado. Le pregunté: ‘¿Cómo estás?’ y él dijo: ‘Pete, estoy arruinado’. Era enorme y estaba arruinado. Pero no nos importaba una mie*da el dinero. Vivía en una casita en Twickenham, estaba feliz de estar junto al agua. Tenía un coche. Tenía un pequeño estudio, era muy feliz. Tenía una esposa hermosa, hijos encantadores, grandes amigos y nunca me faltó nada realmente, excepto algo de tiempo para mí y algo de tiempo para tener con mi familia”, recordó Pete.
A pesar de las adversidades financieras del pasado, Pete se mostró agradecido por su presente y la oportunidad de ser maestro y mentor para nuevos talentos en la música.
“Así que hoy tengo la sensación de que tengo la suerte de estar aquí y estar lo suficientemente en forma como para dar la vuelta a la manzana y trabajar con músicos más jóvenes, para producir y ser mentor”, concluyó.
La historia de The Who es un recordatorio de que, a menudo, detrás de los grandes éxitos y la fama, existen desafíos y sacrificios ocultos. La lucha de la banda con la mala gestión financiera es una advertencia para todos los artistas sobre la importancia de una gestión adecuada y la protección de sus derechos e ingresos.