La vida personal y familiar de Brad Pitt y Angelina Jolie sigue siendo tema de conversación, y esta vez no se trata de su trabajo en la pantalla grande, sino de una decisión tomada por tres de sus hijos en común. Desde su sonado divorcio en 2016, la pareja ha estado envuelta en tensiones legales y mediáticas, y ahora la atención se centra en los nombres de sus hijos.
Vivienne, Zahara y Maddox, tres de los seis hijos que comparten las estrellas de Hollywood, han optado por renunciar al apellido de su padre y usar exclusivamente el de su madre, Angelina Jolie. Esta decisión se hizo evidente recientemente cuando Vivienne Jolie-Pitt, de 15 años, apareció en el cartel de “The Outsiders” solo como Vivienne Jolie.
El cambio de nombre de Vivienne sigue los pasos de su hermana mayor, Zahara, quien también decidió dejar de usar el apellido de su padre. Dadas las tensiones y disputas legales entre Pitt y Jolie desde su divorcio, esta decisión no ha sorprendido a muchos observadores.
La relación entre Pitt y sus hijos ha sido tensa desde que Jolie solicitó el divorcio y pidió la custodia física exclusiva de los seis niños en 2016. Aunque Pitt ha intentado reconciliarse con ellos, el progreso ha sido lento.
Una fuente cercana al actor compartió: “Ha sido una situación triste durante años. Desde que Angelina solicitó el divorcio, Brad se ha centrado en tener la mejor relación posible con sus hijos. Ha sido muy difícil para él. Muchas veces, ha habido largos intervalos en los que no ha visto a los niños en absoluto.”
A pesar de los desafíos, Pitt sigue comprometido con la idea de restaurar su relación con sus hijos. La fuente agregó: “Él cree que llegará un momento en el que volverá a tener una gran relación con sus hijos.”
La noticia del cambio de apellido de Vivienne y Zahara pone de manifiesto los complicados y prolongados desafíos que enfrentan Pitt y Jolie en su vida familiar después del divorcio, destacando la importancia de la comunicación y la reconciliación en medio de las diferencias.