Cada último día de febrero, desde 2008, el mundo se une para visibilizar las enfermedades raras, aquellas condiciones que afectan a un pequeño porcentaje de la población pero que cambian vidas por completo.
Febrero es un mes especial, ya que puede tener 28 o 29 días en los años bisiestos. Esta particularidad simboliza la rareza de estas enfermedades, que afectan a una minoría, pero con un impacto profundo en quienes las padecen.
Son trastornos que afectan a una pequeña parte de la población y, en la mayoría de los casos, tienen un origen genético. También se les conoce como enfermedades huérfanas. Sus síntomas son difíciles de diagnosticar, lo que complica su tratamiento y atención.
Se estima que alrededor del 8% de la población mundial las padece, lo que equivale a aproximadamente 350 millones de personas en todo el mundo.
🔎 El reto sigue siendo el diagnóstico temprano y el acceso a tratamientos adecuados.
Porque cada historia importa, porque cada paciente merece ser escuchado. ¡Hagamos ruido y sumemos esfuerzos!