El reconocido rapero y productor estadounidense Sean “Diddy” Combs, también conocido como “Puff Daddy”, se encuentra nuevamente bajo los reflectores tras enfrentar la cuarta acusación de agresión sexual en menos de un mes.
Detalles de la acusación
La denuncia civil, presentada en un tribunal federal de Nueva York, alega que en 2003, cuando la denunciante tenía 17 años, Combs y sus colaboradores la violaron repetidamente. La trágica historia narra cómo fue convencida de viajar desde Detroit a Nueva York en un avión privado, donde, según el documento, se le obligó a practicar sexo oral antes de ser víctima de abuso sexual y consumo de drogas.
Patrón de acusaciones
Esta es la cuarta demanda por violación que enfrenta Combs en menos de un mes. Todas las denunciantes describen al rapero como un hombre violento que utilizaba su fama para acosar e intimidar a las mujeres. Las anteriores demandas incluyen a la cantante Cassie y a Joi Dickerson-Neal, quien denunció delitos ocurridos en 1992 y fue amparada por una ley temporal de Nueva York que permite denunciar delitos sexuales prescritos durante un año.
Respuesta legal y negación de Combs
Douglas Wigdor, abogado de la última denunciante y también representante de Cassie, ha condenado los actos como “abominables” y asegura que han dejado una marca indeleble en la vida de su cliente. Combs ha negado enérgicamente todas las acusaciones. Su abogado aún no ha respondido a los nuevos señalamientos.
Impacto en la industria musical
Sean “Diddy” Combs, fundador de Bad Boy Entertainment en 1993, ha sido una figura influyente en la comercialización del hip-hop, guiando a artistas destacados como Notorious B.I.G. y Mary J. Blige. Las recientes acusaciones plantean preguntas sobre cómo este escándalo afectará su posición en la industria musical y la percepción pública de su legado.
