La trágica muerte de Canserbero, el talentoso rapero venezolano, ha dado un giro sorprendente. Inicialmente considerado un suicidio en 2015, las autoridades venezolanas ahora sugieren que fue un homicidio. Aquí desentrañamos los oscuros detalles que rodean este caso.
La historia de Canserbero, también conocido como Tirone José González Orama, conmocionó al mundo de la música latinoamericana cuando se informó su supuesto suicidio a los 27 años en enero de 2015. Sin embargo, las circunstancias detrás de su fallecimiento han sido objeto de especulación desde entonces.
La “Versión Oficial” y las irregularidades
Inicialmente, se afirmó que Canserbero, presuntamente sufriendo de esquizofrenia y depresión, se lanzó desde el décimo piso de un edificio en Maracay. La versión oficial indicaba que, en medio de una crisis psicótica, apuñaló a su amigo y productor Carlos Molnar González antes de quitarse la vida.
Sin embargo, la familia del rapero cuestionó esta narrativa desde el principio, destacando la falta de evidencia de trastornos mentales en Canserbero. Surgieron irregularidades, como la ausencia de la cantidad esperada de sangre en las manos del artista y la aparente manipulación de la escena del crimen.
Reapertura del caso y revelaciones impactantes
En noviembre de 2023, el fiscal Tarek William Saab anunció la reapertura de la investigación. Después de exhumar el cuerpo, se descubrió que Canserbero fue apuñalado antes de su caída y recibió golpes con un objeto contundente.
En una conferencia de prensa el 18 de diciembre de 2023, Saab declaró que la versión del suicidio se descartó por completo. En cambio, se propuso una nueva hipótesis: Canserbero fue asesinado. Además, se señaló que al menos “seis personas” estuvieron involucradas en las muertes de Canserbero y Carlos Molnar.
Así fue el asesinato de Canserbero que fue ejecutado por Natalia Améstica y su hermano Guillermo pic.twitter.com/001hl3DR7s
— Julio Riobó VTV (@JRioboVTV) December 26, 2023
La historia dio un giro aún más impactante cuando, el 26 de diciembre de 2023, Natalia Améstica, exmanager de Canserbero, confesó su participación en el asesinato. Según su declaración, administró un té con alpram a Canserbero y a Molnar para adormecerlos.
Améstica admitió haber apuñalado a Molnar y luego a Canserbero mientras este estaba somnoliento. Llamó a su hermano Guillermo, quien llegó con funcionarios para manipular la escena del crimen y hacer que pareciera un “homicidio-suicidio”. Tanto Natalia como Guillermo Améstica enfrentan acusaciones graves, incluido el “homicidio calificado por motivos fútiles y con alevosía en grado de complicidad”.
Después de ocho años de especulación, parece que se están arrojando luz y verdad sobre la trágica muerte de Canserbero. La confesión de la exmanager plantea preguntas sobre las circunstancias reales que rodearon su fallecimiento y el papel de quienes estuvieron directamente involucrados.
